Una elefante y una perrita se embarazaron al mismo tiempo. Tres meses después la perrita parió 6 cachorritos. Seis meses más tarde la perra estaba embarazada de nuevo, y nueve meses después dio a luz a otra docena de cachorros. Y así el patrón continuaba.
En el mes dieciocho la perrita se acerca a la elefante para cuestionarla: «¿Estás segura que estás embarazada? Quedamos embarazadas en la misma fecha, yo he dado a luz 3 veces a una docena de cachorros y ellos ya son perros adultos y tú aun sigues embarazada, ¿Qué es lo que pasa?»
La elefante respondió: «Hay algo que quiero que entiendas. Lo que yo cargo no es un cachorro, es un elefante. Yo solo doy a luz a uno en dos años. Cuando mi bebe toque tierra, la tierra lo va sentir.
Cuando mi bebe cruce una calle los humanos se detendrán a ver con admiración, lo que yo cargo llama la atención. Así que lo que llevo es poderoso y grande.»
No pierdas la fe. Cuando mires a otros recibiendo pronto sus gratificaciones, no sientas envidia, si no has recibido tus propias bendiciones no te desesperes, di a ti mismo: «Mi tiempo está llegando y cuando llegue, la gente quedará admirada.»